Sí, esto nos sucede a todos; los santos más grandes y todos los que han considerado el sacerdocio o la vida religiosa han sentido este temor.
Si también lo has sentido, ¡qué bien por ti! Eso significa que eres una persona sana, santa y normal.Es natural sentirse así, porque queremos estar cerca de las personas que nos son queridas, especialmente en días familiares o días festivos. Ciertamente, cuando pensamos en la vida religiosa, estamos pensando en una vida fuera de casa, en ser enviados a cualquier parte del mundo en misión. Más que nada, a veces tenemos miedo a estar lejos si algo malo les sucede a nuestros seres queridos y nosotros estamos lejos de ellos.
Pero Jesús nos promete cuidar a los que amamos. ¡Y Jesús cumple sus promesas! Jesús menciona que te dará cien veces más de lo que le das a él. ¡Pregúntale a cualquier religioso o religiosa y verás que es verdad!
¡Entonces, no tengas miedo! ¡Agradece que Dios que te haya elegido como instrumento a través del cual Dios hará grandes cosas!
Ponte en contacto con un director vocacional aquí y comparte con él tus esperanzas, sueños y temores. Estamos aquí para ti: www.myclaret.org.